La empresa del Grupo ADEO repartió en 2016 más de 28 millones de euros entre sus empleados en concepto de políticas de participación.

Una de las señas de identidad de Leroy Merlin son sus políticas de participación, a través de las cuales comparte cada año parte de sus beneficios con todos sus empleados. Dichas políticas incluyen una prima de progreso trimestral, directamente relacionada con los resultados de cada centro de trabajo, y una participación anual en los beneficios obtenidos a nivel nacional. Además, todos los colaboradores tienen la oportunidad de convertirse en copropietarios/as de ADEO, grupo al que pertenece la compañía, mediante un programa de accionariado. En la actualidad, un 93,3% de los colaboradores/as de Leroy Merlin son accionistas de ADEO.

La política de Recursos Humanos de Leroy Merlin gira en torno a cuatro ejes: compartir el querer, gracias a un proyecto de empresa con un objetivo común; compartir el saber, a través de la información y la formación de las personas; compartir el poder, mediante participación en la toma de decisiones de forma cotidiana y finalmente compartir el haber, a través del reparto de beneficios. Leroy Merlin comparte beneficios con sus colaboradores desde 1998 y durante los últimos cinco años ha repartido más de 124 millones de euros.

Además,  la enseña crea empleo de calidad gracias a un proyecto empresarial estable y a largo plazo. El 80,3% de los colaboradores cuentan con un contrato indefinido y el 50% de los puestos de responsabilidad provienen de promoción interna. De este modo, se reconoce la gran implicación y profesionalidad de los equipos con avances en sus carreras profesionales.

Resultado de este modelo empresarial que apuesta por las personas, la compañía se posiciona como referente en políticas de Recursos Humanos, habiendo obtenido la certificación Top Employer España 2017 y estando presente en el ranking Best Workplaces 2017 y en el Merco Talento 2016.