El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso anunció la puesta en marcha de Última Milla, el proyecto que habilita a los trenes del metro para transportar mercancías. La presidenta regional explicaba que el objetivo de esta iniciativa piloto es reducir la contaminación en la ciudad, evitando así la movilización de unos 5.000 paquetes diarios. Por otro lado, también mejoraría la congestión del tráfico derivada por las furgonetas de reparto.
El proyecto se realiza desde septiembre junto a la compañía de mensajería en la Línea 12 de MetroSur y se mantendrá en desarrollo en un periodo estimado de tres meses. Desde el Ejecutivo madrileño indican que, con el fin de no molestar a los usuarios del transporte público, las pruebas se realizan en trenes específicos de 19:00 a 20:00, llegando a transportar 700 pedidos.
Esta actuación, realizada en colaboración con la empresa de mensajería GLS Spain, empezará a funcionar en los próximos días en la Línea 12 de MetroSur y tendrá una duración estimada de tres meses. Para no interferir con los desplazamientos de los usuarios del suburbano, se lanzará un tren específico para transportar los envíos, unos 700 al día, entre las 19:00 y las 20:00 horas. Además, los bultos estarán custodiados por trabajadores de Metro de Madrid en todo momento. Posteriormente, la compañía de transporte se hace cargo de estos y procede a su entrega.
Una segunda fase en zona de mayor afluencia
En el próximo trimestre dará comienzo una segunda fase en pruebas, junto a la firma de distribución CITYlogin, que tendrá lugar en la estación de Embajadores de la Línea 3. Ya en este escenario, el volumen medio de paquetes rondará los 400 diarios, por lo que sumados a los 700, se repartirán más de un millar.
En la segunda fase, la mercancía, que procede de áreas periféricas de Madrid, se transportará hacia la zona de bajas emisiones ZBE de la capital a través de suburbano. En las primeras horas de la mañana, antes del inicio del servicio al usuario, un tren rápido sin pasajeros llevará los portes hasta Embajadores. Seguidamente, la empresa recogerá la carga y la distribuirá entre los clientes utilizando medios de transporte ecológicos o repartidores a pie con carritos.
Imagen: Metro de Madrid.