En España, las pymes constituyen casi el 100 % del tejido empresarial. Además, crean el 66 % del empleo total. Así lo asegura la ONU. Pese al gran peso que aportan en la economía española, numerosas pequeñas y medianas empresas no cuentan con los recursos y el talento necesarios para afrontar los cambios internacionales. En consecuencia, tampoco son capaces de adaptarse.
Por este motivo, mañana se celebra el Día Mundial de la pyme, una fecha para reflexionar acerca de su relevancia en el desarrollo sostenible de la sociedad.
Aunque tienen una gran importancia estructural, las pequeñas y medianas empresas españolas presentan limitaciones que obstaculizan su capacidad para expandirse, innovar y resistir a los cambios constantes del sector.
Estos son algunos de los retos de las pymes españolas:
- Una productividad baja, situando a España por debajo de la media europea.
- Dependencia del mercado europeo, puesto que el 98 % de las pequeñas y medianas empresas considera fundamental acceder al mercado único. No obstante, se encuentran con barreras regulatorias que limitan su expansión.
- La burocracia y acceder a fuentes de financiación. Por eso, la Unión Europea impulsa políticas como “La Brújula de Competitividad” para reducir el volumen de gestiones de burocracia y así, facilitar el acceso a capitales para poder innovar y escalar.
- La transición digital constante, como por ejemplo, introducir la inteligencia artificial en su actividad empresarial.
- La integración de las políticas sostenibles ESG está estancada, puesto que solamente el 44 % de las pequeñas y medianas empresas europeas las han implementado o están a punto de aplicar planes ESG.
- Gestión de crisis y resistencia. Las organizaciones empresariales de menor tamaño son vulnerables en entornos tan cambiantes y es por lo que les cuesta sobrevivir más de siete años.
Brecha de talento cualificado
La mayoría de las carencias se deben a la falta de talento cualificado. En solo una década, se ha pasado del 3 % al 62 % de pymes que no encuentran personal adecuado. No solamente, necesitan perfiles técnicos o especializados, sino profesionales con una perspectiva global del negocio. En este contexto, escuelas de negocio como TBS-Education Barcelona ofrecen cursos transversales para ser capaces de analizar, liderar, administrar equipos, comunicar, gestionar estratégicamente la empresa, encontrar soluciones en situaciones de crisis, habilidades digitales y conocimientos en sostenibilidad. Gracias a estas formaciones ofrecidas por los centros de negocios como TBS, los nuevos emprendedores tienen el conocimiento para poder fomentar la innovación y mantener la continuidad de la empresa.
Los perfiles más solicitados actualmente son los campos de administración financiera estratégica, marketing digital y ventas, cambio tecnológico, análisis de datos y gestión de proyectos con perspectiva sustentable.
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